Aínda fomento a miña paranoia bilingüe poética-marxinal de escasa calidade. Punto.

Creo que esta señora saberá ben do que falo. Aínda que para o resto do porcentaxe demográfico intelectual do país sexa un pouco incomprensíbel. Que difícil é vivir despois de todo...




Quien busque compasión en tus manos
no tendrá ganas de volver a preguntar
dónde han dormido sus dueños
dónde han perdido sus años
dónde encontrarán más soledad.

Si uno sigue y dos paran, el mundo deja de girar.

Yo quería rescatar lo poco que quedó de mí
pero no tuve paciencia para descifrarme,
para vislumbrarme entre tan poco pudor,
quién podía buscar morteros entre tantas aspirinas,
quién iba a saber que equivalían a mentiras.

Para verme tenía que reflejarme en tres espejos,
buscando invertir mi inherente distorsión
y fueron sus cristales los que nos unieron
cuando empezaron a quebrarse y yo sangré
de puras ganas de estar dentro de ti.

Y ahora me viene bien caer al vacío porque sí,
saber que si uno espera y dos se abrazan
se abandona a la noche la ciudad.
Buscar palabras para ti que no encajan
sigue siendo como la terrible melancolía
de no poder escribirte la canción pop perfecta,
de argumentar contra gritos razones de estado,
de evitar con silencios que se vaya todo a la mierda,
de no saber dónde socavar mi libertad para que empiece la tuya,
y me sobrepasa la drogadicción a tanto amor,
me inyecto de ti día sí y día también
para seguir de rodillas el éxtasis de la rendición.

Toma aire, muerde fuerte, ahora voy a quitarte los clavos.


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Agorafobia:

tódalas cousas boas veñen a confluir aquí,
nestes parques onde os nenos berran
oéndose o murmurio de beizos de parellas que se bican.

Sentímonos ben por primeira vez na hora punta
das misas e os programas-concurso da televisión.

I eu, desaparezo debaixo das sabas,
e só existo se miro pola fiestra,
e temo estoupar en calquera momento
colmada de beleza e dor.